Gracias a la información anónima al call center de Air-e, se detectaron 10 casos de robo de energía para evadir el pago del consumo real en un edificio sobre el Corredor universitario.
El procedimiento se llevó a cabo en el inmueble Paradise Living (Kra 30A N. 1B-245) en Puerto Colombia.
Se encontraron medidores manipulados en 6 apartamentos; 2 medidores con “puentes externos” y dos líneas directas, conectadas en el gabinete principal de medidores, para apropiarse ilegalmente del fluido.
De acuerdo con el gerente de Servicios Jurídicos de Air-e, Fermín De La Hoz Torrente, se afectaba a la misma copropiedad, al apropiarse de la energía de la zonas comunes, perjudicando a los demás usuarios y encareciendo los gastos de administración.
“La defraudación de energía afectaba a todos los residentes y la manipulación de los equipos de medida y gabinetes, ponían en riesgo la prestación del servicio. Por ser usuarios residenciales estrato 5, con esta conducta ilegal evadían el pago de la contribución de solidaridad, correspondiente al 20% del consumo de energía, dinero con el que el Estado cuenta para subsidiar a los usuarios más necesitados”, dijo.
Las irregularidades encontradas están asociadas a los apartamentos 701, 702, 703, 1103, 1302, 1503, 1602; 1701, 1802 y 1803.
De acuerdo con los cálculos iniciales se apropiaron de $13.243.716, por concepto de energía y evadieron el pago de $2.648.343 de la contribución de solidaridad, para un valor mensual en promedio de $15.892.059.
Esto implica que en 6 meses la pérdida total de energía y contribución llega a $95.354.756.
Ante esta situación, la empresa facilitará la información y pruebas necesarias para que investiguen las autoridades, evalúen las conductas y, de ser procedentes, impongan las medidas del reglamento de propiedad horizontal del edificio Paradise Living y la Ley 657 de 2001, que regula la misma materia.
De la misma forma brindará el apoyo y la asistencia que requiera la administración y los residentes de buena fe, que resultaron afectados por esta problemática de algunos propietarios y/o arrendatarios.
También se incurre en el delito de Defraudación de fluidos (artículo 256 del Código Penal), cuando una persona se apropia de la energía que adquiere y cancela otra persona, utilizando cualquier mecanismo clandestino o alterando los sistemas de control o aparatos contadores.
Así, quien incurra en esta conducta podrá pagar una pena máxima de seis (6) años de prisión y una multa de ciento cincuenta (150) salarios mínimos legales mensuales vigentes por $172.500.000,00.
Fuente: Relaciones Externas Air-e