Aminta Geraldino no fue solo una mujer que se caracterizó por ser la primera en muchas cosas, también fue parte de la intelectualidad Soledeña al tiempo que luchaba por lograr espacios para el desarrollo de la cultura municipal.
Compositora, artista plástica, deportista, poeta, Aminta era una polifacética mujer cuya estatura física se comparaba solo con su enorme bondad y don de gente.
“Con honda tristeza nos corresponde despedir su presencia terrenal y presentar a su familia y amigos nuestras más sinceras condolencias. Es un momento muy triste para el territorio y una hora en la cual solo nos queda, como habitantes de esta gran casa que nos une a todos en una sola familia, rendirle honores póstumos y exaltar su labor cívica y cultural”.
Doña Aminta Modesta Geraldino Marín, la primera mujer de Soledad en obtener en la facultad de Bellas Artes de la Universidad del Atlántico, su título en artes plásticas.
Fue también la primera mujer en recibir su cédula de ciudadanía en este municipio y la primera mujer en obtener una curul en el Concejo de Soledad; de igual manera, fue la primera mujer en desempeñarse como inspectora de policía en la localidad.
Son estos roles los que reflejaron su compromiso con el desarrollo y el bienestar de su comunidad, convirtiéndola en una estrella fulgurante en el firmamento de Soledad, que no solo iluminó los senderos de la política con su liderazgo, sino que también pintó los lienzos de la vida con los vibrantes expresiones de su arte.
Poeta, diseñadora y alma creativa, su legado trasciende las fronteras de la política, enriqueciendo el tejido cultural de su comunidad.
Su voz, resonante en el programa “Ecos de Soledad”, inspiró a soñar y a luchar por un mejor territorio.
En la tarde del 20 de septiembre, las calles de Soledad, susurraron un adiós a Doña Aminta, quien ahora descansa en paz junto a todos esos hombres y mujeres que conforman el legado cultural de este territorio, cuna de grandes personalidades como nuestra Aminta Geraldino.
Fuente: Alcaldía Municipal de Soledad
